Aparición de nuestra señora de Las Lajas. (1750)
La historia o leyenda aparece por primera vez escrita en el Papel periódico ilustrado de Bogota-No.109´´de Lázaro María Girón, 1887, y citado por el Padre Julio María Matovelle en el ya citado libro.
El relato es como sigue: Refiere la leyenda que una indiecita que se dirigía de Potosí a Ipiales, junto con su hija Rosa, pasaban por este paraje muy peligroso y una gran tempestad las obligo a buscar refugio en una cueva que allí existía, entro con mucho miedo por las creencias del diablo en ese lugar, pero mas grande fue su asombro cuando la niña que era sordomuda de nacimiento le dijo: ´´Mamita, la Mestiza me llama (este fue el primer milagro de la virgen y aparición de la Virgen).
Corrió a dar la noticia del hallazgo al de Ipiales Padre Eusebio Mejía; quien habiéndose trasladado con varios vecinos al sitio señalado por la joven campesina, hallo sobre la roca desnuda, pulida por siglos, la bella imagen de la Virgen del Rosario.
Después, la vida de Juana y de Rosita se pierde en la noche de los tiempos. Nada sabemos cuándo murió Juana y si hija Rosa. Solo permanece desafiando al tiempo la estampa de ternura y milagros de nuestra señora de LAS LAJAS. Y así como la contemplaron Juana, Rosita, el Sr. Cura de Ipiales y su pueblo, la contemplamos nosotros, sin desgastes, ni retoques, a pesar de la intemperie y el humo de las veladoras y así la contemplan las generaciones que nos empujan hasta la eternidad.